En el corazón del invierno, cuando las calles se visten de chaquetas y bufandas, Educleta transformó un espacio de la Mutual de Seguridad en un mundo de aprendizaje lúdico sobre movilidad segura. Dirigido a los hijos e hijas de trabajadores, el evento “Seguridad vial infantil” combinó juegos y reflexiones para sembrar conciencia vial desde la infancia, demostrando que prevenir siniestros también puede ser una aventura.
Niñas y niños, con chalecos reflectantes y ojos curiosos, descubrieron cómo prevenir siniestros viales a través de un circuito de juegos de mesa y de lonas. “Queremos que niñas y niños lleven el mensaje a sus hogares y sean embajadores de la seguridad vial”, comentó el director de Educleta, mientras los niños jugaban al twister de la seguridad vial. Al finalizar, cada niño recibió un accesorio de seguridad vial y un compromiso simbólico: ser los ojos atentos que recuerden a sus familias que en la calle, la prisa nunca debe ganarle a la precaución. Entre risas y aprendizajes, el evento dejó claro que la educación vial, cuando se siembra con creatividad, florece para toda la vida.